Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en el mundo, especialmente en los países de renta mediana y alta.
Esta mortalidad es potencialmente evitable, puesto que las enfermedades del aparato circulatorio comparten diferentes factores de riesgo, algunos de los cuales son modificables, como por ejemplo la hipertensión, la hipercolesterolemia, la diabetes, la obesidad o el estrés. La hipertensión es la principal causa de infartos de miocardio y de enfermedad vascular cerebral.
La tensión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de los vasos (arterias) al ser bombeada por el corazón. La presión arterial está determinada tanto por la cantidad de sangre que el corazón bombea como por el grado de resistencia al flujo de la sangre en las arterias. Cuánta más sangre bombea tu corazón y cuanto más estrechas estén tus arterias, mayor será tu presión arterial. Por lo que las primeras consecuencias de la hipertensión las sufren las arterias, que se endurecen a medida que soportan la presión arterial alta de manera continua, se hacen más gruesas y puede haber dificultad en que la sangre circule por ellas. Este hecho favorece que se depositen colesterol y triglicéridos en ellas.
Una de las características de esta enfermedad es que no presenta unos síntomas claros y estos pueden tardar mucho tiempo a manifestarse. Sin embargo, constituye el factor de riesgo cardiovascular más prevalente.
La hipertensión es una patología tratable, pero su falta de control puede desencadenar complicaciones graves, como por ejemplo el infarto de miocardio, la insuficiencia cardíaca o el ictus.
¿Cuáles son sus causas?
Si bien todavía no se conocen las causas específicas que provocan la hipertensión arterial, sí se ha relacionado con una serie de factores que suelen ser presentes en la mayoría de las personas que la sufren. Conviene separar aquellos relacionados con la herencia genética, el sexo o la edad, y por tanto poco modificables, de aquellos otros que se podrían cambiar al variar los hábitos y el ambiente en el cual viven las personas, como la obesidad, la sensibilidad al sodio, el consumo excesivo de alcohol, el uso de ciertos fármacos y un estilo de vida muy sedentario.
Si habéis venido a la farmacia, os sonaran estos términos:
- Hipertensión primaria
Se denomina hipertensión esencial o hipertensión primaria a la presión arterial alta (más de 140/90 mmHg) sin una causa reconocible.
- Hipertensión secundaria
Es la presión arterial alta provocada por otra afección médica. La hipertensión arterial secundaria puede ser causada por enfermedades que afectan los riñones, las arterias, el coro o el sistema endocrino.
¿Cuáles son los síntomas a los que tengo que estar pendiente?
Hay síntomas inespecíficos, como las cefaleas frecuentes, que ayudan a detectarla porque ponen en alerta al paciente que decide ir al médico o acudir a la farmacia para que les tomen la tensión.
En otras ocasiones se descubre a raíz de hemorragias nasales espontáneas, sensación de inquietud, nerviosismo, etc. y, de forma menos frecuente, por dolor de cabeza intenso, sensación de frialdad y angustia, palpitaciones y temblor.
Cuando estos síntomas ocurren junto a una elevación importante de las cifras de tensión arterial, se llama crisis hipertensiva.
Claves para mantener unos niveles de tensión arterial adecuados
La tensión arterial tiene dos componentes:
- Tensión sistólica: Es el número más alto. Representa la tensión que genera el corazón cuando bombea la sangre al resto del cuerpo.
- Tensión diastólica: Es el número más bajo. Se refiere a la presión en los vasos sanguíneos entre los latidos del coro.
La tensión arterial alta se clasifica como:
- Óptima: < a 120/80 mmHg
- Normal: de 120/80 a 129/84 mmHg.
- Normal alta: de 130/85 a 139/89 mmHg.
- Estadio 1 de hipertensión: de 140/90 a 159/99 mmHg.
- Estadio 2 de hipertensión: de 160/100 a 179/109 mmHg.
- Estadio 3 de hipertensión: mayor de 180/110 mmHg.
*La tensión arterial se mide en milímetros de mercurio (mmHg).
¿Y tú ya sabes cual es tu nivel de tensión arterial? ¿Llevas un control?
Con este post esperamos que hayas aprendido un poco más sobre esta patología tan común. Te invitamos a visitarnos en la farmacia y te haremos controles periódicos para evitar enfermedades de riesgo cardiovascular.